Época: Reinos Hispanos
Inicio: Año 1070
Fin: Año 1122

Antecedente:
Arquitectura y escultura
Siguientes:
Santiago y el maestro Mateo
El camino de las estrellas

(C) Isidro G. Bango Torviso



Comentario

En la década de los años setenta del XI, se procede a levantar un gran templo acorde con la nueva arquitectura sobre el sepulcro de Santiago. El promotor fue el obispo compostelano Diego Peláez, quien dispuso su construcción conservando, mientras que duraba la nueva obra, el primitivo santuario. Un enfrentamiento con Alfonso VI supuso la deposición del prelado en 1087 ó 1088, y la consiguiente paralización de las obras. Poco después, Diego Gelmírez se hará cargo del gobierno de la diócesis y dará tal impulso a los trabajos que ya, en 1112, se podía demoler la basílica prerrománica. En 1115 se aporta la mano de obra de unos piratas almorávides hechos prisioneros por la armada de Gelmírez. La conclusión provisional tendrá lugar en el año 1122. Para entonces estaría terminado el templo menos la fachada occidental y el tramo inmediatamente anterior.
El proyecto de catedral compostelana corresponde al mejor exponente de la tipología de iglesias de peregrinación y, con toda seguridad, del estilo mismo. Es un proyecto maduro, en el que se articulan todas sus partes -girola, tribuna, torres, etc.- de una manera armónica. Tal fue su perfección paradigmática que los constructores de San Martín de Tours la tomaron como modelo.

Pero si su arquitectura es excepcional, su aportación a la escultura monumental no lo es menos. Los escultores que trabajan en torno a 1100 proyectaron la realización de una complejísima decoración esculpida para las fachadas del crucero. Aunque recompuesta por obras posteriores, la actual portada de Platerías nos permite poder apreciar el orden monumental a la antigua con que fue pensada. Mochetas, arquivoltas y columnas enmarcan los dos vanos de la portada, que tienen tímpanos esculpidos. La decoración supera la ornamentación del simple vano para trascender a cornisas, impostas y órdenes columnarios. Por su cronología, es la primera gran fachada monumental conservada del románico pleno.

El mensaje que las gentes podían leer sobre los muros del templo tenía una clara misión catequética. Aquí, una vez más, el programa iconográfico hacía una amplísima referencia al tema redentor del ciclo cristológico, sin que el programador haya olvidado utilizar temas populares con un estricto sentido moralizador. En el Codex Calixtino, al describirnos el significado de las imágenes de la fachada de Platerías, se detiene en la figura de una mujer que ocupa un lugar en uno de los tímpanos: "... junto a la tentación del Señor está una mujer sosteniendo entre sus manos la cabeza putrefacta de su amante, cortada por su propio marido, quien la obliga dos veces por día a besarla. ¡Oh, cuán grande y admirable castigo de la mujer adúltera para contarlo a todos!".

La experiencia arquitectónica en la catedral compostelana tendrá una gran trascendencia en la construcción de edificios gallegos durante la primera mitad del XII. La sufragánea diócesis de Tuy proyectará la iglesia más ambiciosa, no tendrá girola, pero sí se planteará la realización de una tribuna sobre las colaterales. El templo no se concluirá hasta época gótica, lo que supuso una cierta transformación de la idea original.